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"... y así, después de caminar un rato, sabiendo que Odiseo era solo una posibilidad, Penélope recogió sus partes, se reconstruyó y decidió caminar.
Por intuición se sobrepuso a sus amantes, tal vez, presientíendolos como más equívocas posibilidades, y por el ojo de una aguja pasó tímida y segura...a cantar su propia letra, a escribir lo suyo y pintar sus colores..."
Niña querida, ¡Como me asustás cuando me pensás ejemplo! Si supieras las veces que me equivoco y las que tiemblo pensando que te puedo llevar a algún error que te haga sufrir...
Somos parte de la misma vida, somos semilla de lo mismo, mismo género, mismo viento que nos arrastra pero nos gusta oponerle resistencia...
Vos, desde tu jóven vida, confusa, artística, que por momentos camina y por momentos se queda a jugar con las sombras de proyectos enormes...
Yo, desde mi unpocomenosjoven vida, unpoco confusa, muchomenos artística, que por momentos camina y por momentos se queda a jugar con las sombras de proyectos enormes...
Qué decirte que no vayas a descubrir con los caminos que te quedan. Orgullo absoluto de saberte expectante ante la vida que se rompe frente a tus fuerzas.
Te reescribo, y te re-escribo, como si las letras lograran empujar el viento. Como si la puta manera de vivir corriendo en esta húmeda ciudad, fuera suficiente para olvidar que se te va la vida en círculos vacíos, vanos, sin cierre, que ruedan a la nada eternamente...qué manera descontrolada de perder palabras.